Un regalo de agradecimiento a las enfermeras

Cuando Ainhoa aún no había nacido, le diagnosticaron que tenía un problema de salud, leve pero lo tenía. Que tendría que llevar un control más seguido que el habitual, más vigilancia con las fiebres pero que muchos niños recién nacidos tenían el mismo problema, aunque cuando son un poquito más grandecitos se les opera y todo se arregla.

Así que mi prima ha pasado mucho tiempo en el hospital, demasiado. Y las enfermeras se han portado muy bien con ella (y con lo papás) y le han tomado mucho cariño (es que está para comérsela). Por eso, mi tía me pidió si les podía hacer una cajita en agradecimiento a toda la atención que le han dado y todo el cariño que han mostrado.

Besitos!!!